Femicidios: Sigue la Ola del Terror

Por Paulina Mercado, Corresponsal La Opiñón
El año recién pasado cerró con un número lamentable y vergonzoso de muertes por femicidio. 62 fueron las mujeres que desde el 2007 ya no pueden volver a perdonar la violencia, que ya no pueden creer que esto “no volverá a pasar”, que no volverán a tocar las puertas de una comisaría para conseguir ayuda y resguardo.
La violencia contra las mujeres sigue siendo un reflejo de lo que vivimos como sociedad y a la vez una señal de la invisibilización de nuestra presencia en el mundo frente a nuestros compañeros y compañeras de mundo.
¿Qué es lo que empodera a un hombre para tomar la vida de una mujer, que muchas veces es con quien comparte amor, y terminar aniquilando su existencia a golpes, hachazos o de cualquier cruel herramienta de asesinato?
Cuando hablamos de razones saltan a la luz algunas curiosas respuestas por parte del femicida: “La maté por amor”, “Por celos”, y la clásica “Por que era mía”. Dónde queda ese amor que dijeron tener, dónde queda el respeto por la otra persona, y más aún, el respeto por nosotras/os mismas /os.
Quizás el problema pasa nuevamente por este modo de ver el mundo, esta imposición de poder establecido que difiere en lo equitativo. De partida no somos iguales, hombres y mujeres somos muy diferentes, pero a partir de esta diferencia se hace necesario construir una igualdad que traspase los límites de la violencia y que visualice a ambos sexos con iguales derechos de vivir.
¿Qué hacer frente a estos actos? Por que soy consciente que lograr “vernos“ no es algo fácil, ya que son cientos las instituciones (gubernamentales y no) que luchan día a día por cambiar esta situación, y empoderar a las mujeres para que todas ejerzamos nuestros derechos, y aún así siguen existiendo injusticias, desigualdades, violencia y uno tras otro femicidio.
Hoy lamentamos ver engrosar la lista de mujeres asesinadas, ver el dolor y el pesar que vivieron nuestras congéneres y su contexto de vida hecho pedazos por un acto de violencia. ¿Qué hacemos nosotras, nosotros, la sociedad toda por cambiar esto?
“La violencia contra las mujeres es la mayor atrocidad contra los derechos humanos de nuestros tiempos. Desde que nacen hasta que mueren, tanto en tiempo de paz como en la guerra, las mujeres se enfrentan a la discriminación y la violencia del Estado, la comunidad y la familia” (Amnistía Internacional, 2004)”.
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