¿Cómo es la Formación de profesores?

Para lograr un futuro más optimista en el mejoramiento de la calidad de la educación, ésta debe estar garantizada por una red de profesores especialistas en todos sus niveles empezando desde los primeros y segundos ciclos de enseñanza básica en cuyas asignaturas del plan de estudios debieran considerarse todas las técnicas pedagógicas existentes y que han sido probadas como exitosas en nuestro país y otras naciones más desarrolladas pedagógicamente ya que para enseñar a leer y escribir se requieren profesores con habilidades y condiciones especiales para lograr buenos resultados.
Sería conveniente implementar la formación de profesores especialistas de asignaturas y la consiguiente formación sicológica para conocer a los niños que están en pleno desarrollo físico y también formar profesores de enseñanza media para atender a los jóvenes que deben ser preparados adecuadamente para integrarse al mundo laboral en el campo tecnológico, científico y artístico en el que les va a tocar vivir y prepararlos adecuadamente para su ingreso a las universidades y así optar en mejores condiciones a las profesiones que ofrecen las instancias superiores.-
Los profesores que fueron formados profesionalmente en las Escuelas Normales, estudiaron con todos los gastos pagados por el Estado y ofreciendo un sistema de internado que permitía postular a esta enseñanza a alumnos alejados de los centros formadores y que por sus condiciones económicas no podían costearse alguna educación con gastos propios y en esas condiciones el Estado se hacía cargo de la educación de los jóvenes provenientes de los últimos cursos de educación primaria y con excelentes comportamientos pedagógicos, habilidades personales y vocación docente auscultada por sus profesores jefes.-
Todos los postulantes eran sometidos a exámenes, específicos, entrevistas personales y demostración de potencialidades artísticas y deportivas, las cuales eran detectadas por una comisión especial de docentes de las respectivas Escuelas Normales a las cuales se postulaba.
En el fondo se privilegió siempre las capacidades intelectuales de los alumnos las que fueron moldeadas por los docentes en las aulas estudiantiles inculcándoseles cada vez que era necesario el sentido vocacional de cada alumno y con estas premisas puestas en la mente y en el corazón miles de normalistas salieron a los campos y las ciudades como quijotes blandiendo sus espadas al viento dispuestos a erradicar el analfabetismo existente y dar educación a todo aquel que lo necesitase sin mediar de por medio, recompensas económicas o de otra especie y cuyos resultados se consiguieron y muchos educadores son recordados hasta el día de hoy como la expresión viva del apostolado que significa ser profesor.